Qué ver en Chalamera
Chalamera tiene sus raíces en la Edad del Bronce, con varias teorías sobre el origen de su nombre. Se encontraron restos arqueológicos que abarcan poblados antiguos, como ilergetes, íberos y cartagineses. Tozal Redondo reveló herramientas de sílex, utensilios y monedas ibéricas. La primera mención escrita data de 1089, cuando el rey Sancho Ramírez otorgó iglesias al obispo de Roda, incluyendo Santiago, Santa María y más tarde San Martín.
Chalamera fue perdida y recuperada varias veces debido a su ubicación cerca de la frontera musulmana en el siglo XII. Los templarios, establecidos en Chalamera, reconstruyeron el castillo y la ermita actual. La resistencia templaria al asedio culminó en la destrucción del castillo. Tras la desaparición de la Orden del Temple, la encomienda pasó a la Orden del Hospital en 1308.
En el siglo XX, Chalamera evitó la construcción de centrales nucleares debido a las protestas locales y apoyo de Aragón. La iglesia de San Martín presenta una arquitectura rectangular, mientras que la ermita de Santa María es románica con una planta de cruz latina y ábsides decorados. La Plaza de Ramón J. Sender conmemora al autor. Las trincheras de la Guerra Civil están ubicadas en una ladera, y los restos del Castillo de Chalamera se hallan en un cerro al noroeste. El Mirador El Tozal ofrece vistas panorámicas, y el Embarcadero Municipal permite la práctica de deportes acuáticos en el río Alcanadre. El Parque «La Pardina» con juegos infantiles se encuentra en la entrada sur.