Codo, un apacible pueblo con 208 habitantes, es famoso por sus ricas tradiciones y festividades únicas. Las fiestas mayores se celebran el 20 de agosto en honor a San Bernardo, que tiene una conexión histórica con el pasado cisterciense de la región.

Una de las características más distintivas de Codo es su famoso Dance o paloteado. Este baile se ejecuta con trajes tradicionales adornados con cintas y cascabeles, acompañados de palos característicos. La música que lo acompaña es igualmente especial, ya que presenta composiciones originales y únicas en la tradición musical aragonesa. Aunque un dance con espadas y broqueles ha desaparecido con el tiempo, estas danzas perduran como una parte fundamental de la identidad cultural de Codo.

El dance consta de varias partes, comenzando con el pasacalles «Cuatro Galanes». Luego, sigue con mudanzas como «La Malva», «El Cerecero», «Los Pajarillos», «San Bernardo» o «El Santo» y «Los Tordos». Cada una de estas mudanzas tiene su propia historia y significado, lo que agrega profundidad y autenticidad a esta expresión artística.

El patrimonio de Codo también incluye la Iglesia de San Bernardo, el Lavadero de Codo, el monumento a los Requetés caídos y la Balsa de Codo, que se encuentran cerca del centro urbano. Codo, con su rica cultura y festividades únicas, es un lugar que atesora su patrimonio y tradiciones con orgullo.