Los hechos acontecidos en la localidad en el s. XVI, han generado una serie de actividades en la actualidad para conocer mejor la historia y el entorno:

Representación teatral de Lo Consel de Laspauls:  se celebra bianualmente, siendo un reclamo turístico y cultural que da relevancia al ahorcamiento de las 24 mujeres acusadas de brujas durante el siglo XVI  en el municipio por el corregidor del Reino de Aragón, por mandato del rey Felipe II. Los vecinos del pueblo escenifican con música, vestidos y los utensilios de la época con el público en los mismos escenarios naturales donde acontecieron. Cada edición aporta nuevos elementos y actividades.

Parque temático de las brujas: está localizado el Serrat Negre o Serrat de las Forcas y propone varios senderos a 3 km del pueblo. Allí se talaron árboles para así fabricar las orcas para sentenciar a las brujas. Un paisaje que es recomendado recorrer en familia lleno de esculturas temáticas.

Centro de interpretación: junto a la iglesia, encontramos este espacio para poder indagar más acerca de la ejecución de las brujas y los instrumentos utilizados para tu tortura de la época correspondiente. Podemos ampliar información con el ayuntamiento respecto a horarios y visitas.

Las fiestas del Solsticio de Verano en los Pirineos son incluidas por la UNESCO en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Los lugareños pirenaicos vinculan el fuego a la quema el pasado con la tierra y también a su comunidad la cual el paso del tiempo no ha logrado apagarla.

Coincidiendo con la festividad de San Juan, los lugareños se reúnen alrededor de la hoguera, la cual se realiza en un punto elevado del pueblo, un camino iluminado por las fallas hechas anteriormente por cada casa que tradicionalmente han transmitido entre generaciones, donde se comparten bailes y una cena popular junto con petición de deseos.

Un maravilloso paisaje natural consolidado el cual se entrelaza con las tradiciones festivas de la zona. La herencia que ha dejado de generación a generación en distintos campos lo enriquece, siendo un reclamo para visitar la zona. El río Ésera atraviesa el Plan de Están hasta Seira, rodeado por el Pirineo central al norte y las Sierras Interiores en sus laterales.

San Esteban de Villarué: data de 1143 presenta rasgos marcados del románico. Tiene una nave de arco de medio punto y ábside semicircular con una bóveda de cañón dividida en 2 tramos y una cabecera con bóveda de cuarto esfera. Además tiene un campanario con doble espadaña como elementos más característicos del estilo que representa.

Iglesia de San Martín de Espés: es un templo románico del s. XII Una única bóveda de cañón y una fachada con arcos trabajados en detalle con un ambiente idóneo para la meditación.

Ermita de Ardanué: desde su entrada, percibimos elementos como la espadaña doble y un ojo de buey por el cual atraviesa la luz solar ambos pertenecientes al estilo románico. Una vez dentro del templo, percibimos 2 arcos ciegos junto a una pila bautismal. Además de un altar más reciente en honor a San Esteban.

Ermita de Santa Paula del Turbiné: emplazada en un lugar privilegiado con vistas de los alrededores. Data del s. XII siendo consagrada por el obispo de Roda de Isábena. Como elemento diferenciador mencionaremos las lajas de su tejado de dos aguas, sostenidas por un sillarejo irregular.

Ermita Santa Llusia: un buen punto de partida para descubrir rutas por la naturaleza que nos ofrecen los pirineos entre montañas e impresionantes paisajes.

Ermita de la Piedad: se encuentra en el municipio de Espés. Construida en mampostería de planta rectangular emplazada en un desnivel del terreno tiene un tamaño irregular rejuntada con cemento y acondicionada en hiladas ordenadas.

Ermita de las Aras: esta vez ubicada en la zona alta de Espés, desde la cual podremos disfrutar de unas vistas panorámicas de los valles y el paisaje montañoso que lo rodea en su esplendor.

Un espacio homenaje al párroco de la localidad, Domingo Subías, donde se muestran varias de sus esculturas forjadas en hierro. Un jardín que acoge al río Isábena que pasa por la localidad, ofreciendo un lugar donde poder contemplar la obra.

Ha sido remodelado como punto de información histórico acerca de la función que daban estos espacios de producción en la comunidad rural. Destaca su valor, el trabajo que implica moler cereal, así como las obligaciones que conlleva, las labores y tradiciones. Un espacio usado para otros eventos de carácter cultural. En la zona encontraremos otros museos como son los de Abella, Alins o Espés.

Carnaval: una festividad presente lo largo del tiempo en la zona, llena de música y danza sin olvidar los clásicos disfraces y máscaras que llena de alegría a sus habitantes.

Tronca de Navidad: Una festividad que se realiza los días previos a Navidad enfocada a los niños pequeños donde se elige un tronco especial y lo colocan en el centro de la casa, cuidándolo y ofreciéndole dulces como si fuese un miembro más de la familia. La misma noche de navidad, se golpea suavemente el tronco mientras se cantan cánticos tradicionales.

Camino de Santiago: encontraremos peregrinos atravesando el tramo que pasa por la Comarca de la Ribagorza, disfrutando de la naturaleza y el patrimonio histórico y monumental como Roda de Isábena o el monasterio románico de Obarra.

Romerías: se realizan varias a distintas ermitas, como a su patrona, Santa Llusia, donde se llevan ofrendas florales además de llevar trajes tradicionales. Otra es la de las Aras, que rinde homenaje a los pilares de piedra tallada del pueblo, cantando canciones para honrar a los antiguos pobladores. Por último nombraremos la romería de San Marc el santo patrono de los agricultores y ganaderos, los cuales solicitan la bendición y la protección para los cultivos y animales.

El paisaje montañoso de Laspaúles nos ofrece una abundante diversidad de flora y fauna, además de espacios naturales protegidos de ensueño donde disfrutaremos de unos días de desconexión entre hayedos y abetos donde podremos recoger una gran variedad de setas por los caminos, que son utilizadas para la cocina local. Además también encontraremos plantas medicinales utilizadas durante miles de años para hacer infusiones y así calmar dolores o simplemente relajarse y también para aliviar problemas respiratorios y digestivos, y al mismo al mismo tiempo conectarse con la naturaleza.

Un lugar idóneo para la observación astronómica, sus cielos nocturnos despejados y la altitud hacen posible el avistamiento de lluvias de estrellas estivales, especialmente en torno al 10 de agosto, recibiendo la denominación de lágrimas de San Lorenzo.