Eventos y fiestas Albarracín

Eventos y fiestas Albarracín

Teruel


LA VIRGEN DEL CARMEN

Julio

4 al 16 de julio

La procesión de la Virgen del Carmen comienza en la iglesia de Santiago, para bajar a la Plaza Mayor de donde se parte hacia el Portal de Molina; antes pararemos en la placeta de la Comunidad, que está adornada en esta ocasión para recoger en su centro a la imagen de la Virgen y efectuar allí un breve rezo. La procesión continúa calle arriba, pasa el Portal de Molina y descansa ante la fuente, en la confluencia de calles, donde los habitantes del barrio del Portal preparan un altar para guardar la imagen, mientras sacerdote y acompañantes rezan. Seguiremos después por la calle de la Virgen del Carmen, que comienza en un arco de hiedra construido expresamente para este día y en el que se puede leer «Viva la Virgen del Carmen». Sin detenernos hasta llegar a la ermita, la procesión continúa su caminar ascendente que pronto abandona la calle empedrada para proseguir por un camino de tierra que en tiempos se llamó camino de Molina de Aragón, de Torres, de la Sierra y actualmente de la Virgen del Carmen. Mientras la procesión asciende, las campanas de la Iglesia de Santiago y de la ermita tañen o voltean y los peregrinos cantan y rezan a intervalos.

FIESTAS PATRONALES

Septiembre

8 y 14 de septiembre

Albarracín celebra a su «Patrona» Santa María el día 8 de septiembre y a su «Patrón» El Cristo de la Vega el día 14 de septiembre, uniendo casi las dos festividades.

Las fiestas de Albarracín tienen fama de ser las mejores de toda la comarca y a ellas vienen casi la totalidad de los serranos. Se componen de verbenas nocturnas con conjuntos musicales de calidad media y alta, conciertos, pasacalles, charangas, novilladas, «cabezudos» acompañados por dulzainas… Albarracín cambia de color, ya que su Plaza Mayor se cierra con troncos de pinos y su suelo se cubre de arena para el festejo taurino; con ello, parece todavía más que estamos en una Ciudad medieval. Por su calidad son recomendables a aquel que guste de trasnochar y, sobre todo, de correr los toros, pues Albarracín posee uno de los «encierros» más peligrosos de España, al soltarse los toros en calles estrechas, todas ellas en pendiente hasta llegar a la Plaza.