Ibieca

Argavieso, Huesca

Ibieca

Argavieso, Huesca


Qué ver en Ibieca

Ibieca, un antiguo enclave histórico, tiene sus primeras menciones en una concordia de 1104 entre el Obispo de Huesca y el abad de Montearagón. Sancho Ramírez conquistó el lugar en el siglo XI. Posteriormente, Ibieca estuvo bajo el dominio de Foces, seguido por la Orden Hospitalaria de San Juan de Jerusalén. Ximeno de Foces erigió en 1249 la ermita de San Miguel de Foces, a unos dos kilómetros del núcleo urbano, como mausoleo familiar.

La Iglesia parroquial de Ibieca, consagrada a San Clemente Papa, presenta una apariencia de fortaleza, especialmente su torre-campanario de sillería. La estructura consta de una sola nave con capillas laterales, en su mayoría de construcción posterior, datando del siglo XVII y XVIII. Aunque la portada es de estilo renacentista, carece de destacado interés. La última restauración relevante tuvo lugar en 1605 bajo la dirección de Domingo Isola.

La Ermita de San Miguel de Foces, situada a dos kilómetros del casco urbano, fue edificada por Ximeno de Foces en 1249 y posteriormente donada a la Orden de San Juan de Jerusalén. Representa la transición del Románico al Gótico y fue declarada Monumento Nacional en 1916. Es el único vestigio del antiguo poblado de Foces, que pertenecía a la familia Foces.

La localidad celebra dos romerías: el 15 de mayo, llevando a la Virgen de Foces desde la Iglesia de San Miguel de Foces hasta la iglesia parroquial, y el primer domingo de septiembre, cuando la virgen es trasladada de Ibieca a San Miguel de Foces. La festividad principal se celebra el 23 de noviembre en honor a San Clemente.

Mapa de localización